“Recuerda una cosa: solo tú mismo coloreas tu mundo con tu actitud. Si la mayoría de tus pensamientos son negativos, entonces la vida será
negativa. Lo opuesto también es verdad. El Cielo y el Infierno no están en
alguna otra dimensión o en algún otro universo paralelo – están aquí en la
Tierra. Tú eliges entre ellos todo el
tiempo con tus pensamientos. Hay asesinatos, prisiones, inundaciones,
accidentes ahí afuera. No te enfoques en ellos. Pueden hacerse parte de tu vida
si tú fijas tu atención ahí. Enfócate sólo en lo bueno. El mal no puede abandonar este mundo, pero como resultado de tus
pensamientos positivos abandonará tu capa del mundo”.
Vadim Zeland
PROTOCOLO DE PRÁCTICA
Las declaraciones creadoras
nos acercan a lo que comúnmente asociamos con el poder de los dioses. Son la expresión más clara del poder de la
palabra, de que aquello que se dice se
transforma en realidad; que la realidad se transforma siguiendo la intención de quien habla.
1º.- Colorea tu realidad emitiendo
para ti la siguiente Declaración Creadora:
Declaración Creadora sobre mis Anteojos Rosa:
¡Sólo yo mismo coloreo mi mundo con mi actitud!
2º.- Apoya tu declaración
creadora, escuchando muy quedo y alerta el siguiente Susurro de tu Celador y deja que te inspiren sus palabras:
Hay muchos lugares
en la tierra donde yo puedo encontrar mis “anteojos rosa”. Estos son básicamente lugares
llenos de felicidad y milagros. Para encontrar tal lugar, me pongo mis
“gafas rosas” e ignoro a toda la gente, a aquella que trata siempre de echarme
abajo, de “ayudarme” a vivir en el mundo real. Cuando algo bueno me sucede, agarro el sentimiento de felicidad y
plenitud y lo induzco todo el tiempo.
Pronto, veo cada vez más “anteojos rosa” – mi
mundo cambia espectacularmente para mejor.
Peregrina/o:
¡Brindemos hoy porque todo el tiempo estamos induciendo un sentimiento
de felicidad y plenitud!
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