LIMPIANDO MI MUNDO

En anteriores entradas de este blog hemos hablado sobre los principios y técnicas del Transurfing para formular y decretar nuestro objetivo vital o principal, para hacer el trabajo de visualizar la diapositiva de ese objetivo y para mover los pies en dirección al mismo.

En esta entrada hablaremos sobre la “limpieza de nuestro mundo”, de “mi mundo” con el propósito de lograr el objetivo.

PROTOCOLO DE PRÁCTICA

Imagínate el siguiente cuadro sugerido por Vadim Zeland: una persona, junto con su mundo, sale en un autobús mágico a un lugar donde los sueños se hacen realidad.

Mundo: Así, amigo, que aquí vamos. Salimos a conseguir tu juguete.

Persona: Sí, mundo.  ¡Es estupendo!

Mundo: El divertido viaje promete mucho, Todo va a ser magnífico. ¡¿Qué más quieres?!

Pero la ansiosa mente no está acostumbrada a eso; está siempre buscando problemas por ahí. ¡Porque todo no puede ser un camino de rosas!

Persona: ¡Eh, detén el autobús!  Yo creo que esa gente honrada me está juzgando. Tenemos que llevarlos con nosotros para hacer enmiendas.

Mundo: No te preocupes por eso, compañero. ¡Quítate ese absurdo de la cabeza!

Persona: No, no, tenemos que llevarlos; si no, no voy a ser capaz de relajarme.

El autobús se detiene, y algunos tipos falsos entran, e inmediatamente empiezan a quejarse y hacer exigencias a nuestro hombre:

Los tipos falsos: ¡Somos tus jueces!

Esto no se puede evitar, de modo que el autobús sigue adelante. Con todo, las cosas no están demasiado mal, pero el hombre está todo nervioso.

Persona: Mira ahí [dice él al mundo]  ¡Qué gente más maravillosa! Llevémoslos con nosotros, ellos serán mis modelos.

Mundo: Perdóname, amigo, ¿pero para qué necesitamos compañeros añadidos?

El mundo hace inútiles intentos de objetar, pero es obligado a estar de acuerdo, y el autobús se llena de individuos arrogantes, cuya toda apariencia demuestra al hombre que él nunca será tan bueno como ellos:

Individuos arrogantes: Somos tus ideales.

Mientras más avanza la carretera, Miedo, Preocupación, Duda, y Peores Expectativas están ya intentando hacer autostop. Y nuestro hombre, por supuesto, trata de razonar con un aire de listo en la cara:

Persona: Quizás estos sabios viajeros nos mostrarán la dirección correcta y nos evitaremos dar un mal paso.

Mundo: Como tú desees, buen hombre [concuerda el mundo mientras deja entrar a la ruidosa gente].

Sabios viajeros: ¡Somos tu sentido común! [Exclaman ellos].

Con sus sensatas quejas esa gente convierte todo el viaje en un infierno sobre ruedas.

Además de todo eso, la carretera es bloqueada por Disgusto, Crítica y Aversión. El hombre no haría nada por evitar encontrárselos, pero el mundo ya está acostumbrado a llevar a todos a quienes la mente dirige su atención. Esos desagradables imbéciles revientan a través de las puertas con rugidos de risas, gritando:

Disgusto, Crítica y Aversión: ¡Somos tu peor pesadilla!

El hombre sería feliz deshaciéndose de estos molestos compañeros, pero es demasiado tarde. El autobús está atestado y no puede moverse ya más. Manipuladores, ídolos de cartón, protestones histéricos, consejeros y algún que otro gusano lo han arruinado todo.

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En conclusión, la metáfora de este viaje en autobús (el viaje del Peregrino Impasible) nos está indicando la tarea de limpiar “mi mundo” o “la capa de mi mundo” de:

ü  La culpa

ü  La importancia interior: el complejo de inferioridad

ü  Las dudas, preocupaciones y miedos

ü  La condena, el descontento y las peores expectativas.

ü  Disgusto, Crítica y Aversión

ü  Manipuladores, ídolos de cartón, protestones histéricos, consejeros y algún que otro gusano

Debo apegarme a los principios del espejo (ver entrada en este mismo blog del domingo 14 de Abril de 2013) para que LA CAPA DE MI MUNDO regrese a su anterior frescura: a los colores, sonidos, sabores, olores de antes, a la sensación de novedad, a la delicia de las esperanzas.

¡Tú eres esa persona  capaz de viajar a ese lugar mágico donde tus sueños se hacen realidad!

¡Brindemos Peregrina/o porque somos capaces de limpiar nuestra capa del mundo mientras nos movemos impasibles hacia la realización material de nuestros objetivos vitales!