En la entrada de esta semana quiero
insistir en nuestra práctica de la semana pasada y anteriores:
“La principal herramienta del
Transurfing es la diapositiva del objetivo: la visualización de un cuadro en el
cual el objetivo ya ha sido logrado”.
Como ya sabes, antes de proceder a
“construir” tu diapositiva positiva, esa
que tiene que ver con tu objetivo vital o principal, es necesario que:
- Escuches
atentamente a tu alma: ¿Qué es lo que ella quiere que hará de tu vida una
fiesta?
- Logres la
armonía entre tu alma y tu mente de tal manera que tu alma cante y tu
mente aplauda.
- Redactes tu
objetivo vital o principal: precisamente aquello que hará de tu vida una
auténtica fiesta. Recuerda que la carrera, la estabilidad, sueldos altos,
negocios millonarios, no son objetivos de vida; son sólo “atributos
acompañantes”, nos dice Vadim Zeland.
Una vez que hayas ejecutado las tres acciones anteriores, entonces, estás listo para “configurar” y luego
“proyectar” permanentemente tu diapositiva positiva.
PROTOCOLO
DE PRÁCTICA
Siguiendo la guía que nos entrega
Vadim Zeland, hoy te resaltaré los
principales aspectos a tener en cuenta a la hora de “construir” y “proyectar”
tus diapositivas positivas:
- No puedes ver la diapositiva como una película
externa.
- Tú debes estar dentro de los acontecimientos
imaginados: lo que estás haciendo cuando el objetivo ha sido logrado, qué
estás experimentando, cómo te estás sintiendo, qué puedes ver, qué puedes
escuchar, qué hueles, qué saboreas y qué está sucediendo alrededor de ti.
- Cuando tú estás en medio de la diapositiva,
estás imaginándote teniéndolo todo por lo que te esfuerzas. No es una
técnica; no hay reglas estrictas. Haz las cosas como puedas.
- Sólo hay un
principio: Estás frente al
espejo del mundo y formas en tu mente lo que te gustaría obtener en la
realidad.
- La diapositiva del objetivo determina el
vector de la corriente de las variantes. Si sigues sistemáticamente poniendo la diapositiva en tu cabeza, la
corriente de los acontecimientos y las circunstancias se encaminarán al
objetivo.
- Al comienzo
del camino no necesitas tener un plan bien definido y saber cómo puede ser
realizado. No deberías pensar en los medios. En el momento oportuno las puertas adecuadas te abrirán caminos
y oportunidades específicos y tú los verás.
- No debes
establecer condiciones rigurosas que determinen el modo en el que el fin deber ser logrado. Tu tarea es enfocarte sobre el
resultado final.
- De vez en
cuando simplemente acuérdate de para qué finalmente te estás esforzando.
Independientemente de lo que estés pensando o haciendo en un momento dado,
vuelve tu atención al objetivo.
- Deja que la diapositiva se convierta en una
imagen de fondo donde cada acontecimiento, cada trozo de información debe ser
visto por ti en el contexto de la imagen de fondo. Esto te permitirá formar tu capa del mundo
más efectivamente, y tu intención
se materializará en la realidad.
- Pídele al mundo que te lleve “en sus brazos”, déjale ver personalmente que tu elección se ha realizado.
¡Hoy le pido al mundo que me lleve en
sus brazos, porque sé que me elección se ha realizado!
¡Brindo en este momento porque todo
está saliendo automáticamente, sin que me dé cuenta!
- “Yo realmente
no entiendo la técnica del Transurfing” -afirma sincera una Peregrina del
Transurfing-, “pero desde entonces he cambiado mi perspectiva de la vida,
he tenido una firme sensación de que todo está yendo magnífico, y sólo irá
mejor. Todo simplemente resultará perfecto”.
¡Brindo porque a cada instante tengo
la firme convicción de que todo lo mío está yendo magnífico y sólo yendo mejor
y mejor!
¡Todo, simplemente, está resultando perfecto!
- Puedes
olvidarte de las técnicas de cualquier tipo, pero si te las arreglas para mantener esta sensación integral
dentro de ti, será suficiente. La
integración de la intención por la fórmula: ¡Lo estoy haciendo
estupendo y las cosas van según el plan!, crea una imagen genérica
de éxito, que es lo que se vuelve reflejado en la realidad. De modo
que tus capacidades están sólo limitadas por tu intención.
¡Haz tu realidad!
¡Brindo porque en este instante lo
estoy haciendo estupendo y las cosas me salen según mi plan!
Brindo porque en este instante y en
todos los instantes ¡hago mi realidad!
¡Brindo porque yo decido esto, porque
yo soy el hacedor, la hacedora de mi realidad!
¡Brindo porque yo, en mi carácter de
hacedor de mi realidad, de hacedora, decido aplicar los principios del Transurfing!
¡Sí, yo he decidido esto porque yo soy el/la Hacedor/a de mi realidad!
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